Nacimiento y auge de los Babes

Nacimiento y auge de los Babes

Si hablamos de desafíos, el cargo de director técnico del Manchester United en 1945 parecía ser el equivalente de escalar el Everest con los pies descalzos.

Durante la década de los 30 el equipo fue bajado dos veces de la primera categoría, y estaba cerca de la bancarrota. Luego en 1941, durante la Segunda Guerra Mundial, la Luftwaffe (la fuerza aérea de la Alemania nazi) bombardeó el Old Trafford, y el United tuvo que jugar sus partidos en casa en el Maine Road - la arena de los rivales locales, el Manchester City.

Tales problemas sin embargo no eran las preocupaciones más importantes para Matt Busby cuando aceptó tomar las riendas del United el 19 de febrero de 1945. Porque Busby tenía una visión deslumbrante: vio hermosura en el estadio bombardeado, y en la oportunidad de hacer surgir un ave fénix de esas llamas.

Nacido en Bellshill, una comunidad minera de Lanarkshire en Escocia, Busby valoraba el trabajo duro, y comprendía lo que se podía lograr con el esfuerzo. Más importante, conocía a Manchester y también a su gente, ya que había jugado para el Manchester City en su victoria en la Copa de la FA en 1934. Su vinculación con el United cambiaría la faz del fútbol inglés.

Después de la guerra, el Liverpool quería a Busby de regreso, como jugador-entrenador. Pero Busby quería construir el futuro, y soñaba con jugadores de menos edad, de piernas jóvenes, a los que pudiera moldear a su imagen. Sabía que los jóvenes eran la clave, no sólo del éxito del United sino también del futuro del fútbol. Encontró un alma gemela en su predecesor, Walter Crickmer, quien seguía en funciones de secretario del equipo. Crickmer contribuyó a fundar el Manchester United Junior Athletic Club (MUJAC) en 1938, y de esas semillas nació el imperio de Busby.

Busby abrió una oficina a dos recorridos en autobús de distancia del Old Trafford. “En esa oficinita no había mucho espacio para soñar ni mucho tiempo para eso, pero si algo hice allí fue soñar”, reflexiona Busby. Rápidamente nombró a un asistente, su antiguo compañero del ejército Jimmy Murphy, quien se puso al mando del equipo de reserva y puso atención especial al equipo juvenil.

En un lapso de dos años, el novedoso estilo directo de Busby proporcionó al United su primer trofeo en casi 40 años. Ganaron la Copa de la FA en 1948 con un fútbol agresivo contra el equipo de Blackpool, al que pertenecía Stanley Matthews, el legendario jugador del equipo internacional de Inglaterra.

Después de llegar muy cerca un par de veces, United ganó el título de la liga en 1952. Pero el equipo estaba envejeciendo y se acercaba el momento de que Busby trajera jugadores jóvenes provenientes de Manchester a su escuadra senior.

Roger Byrne, quien había tenido un desempeño sobresaliente en las etapas finales de la campaña 1951/52 como delantero lateral, fue uno de ellos y no tardó en convertirse en el defensa lateral titular del equipo. Jackie Blanchflower, quien junto con Byrne había sido uno de los primeros jugadores apodados “Babes”, jugó cada vez más al lado del mediocampista central Mark Jones, quien también tuvo unas cuantas apariciones en el equipo ganador del título de 1952. Luego vino Eddie Colman y un muchacho en el cuerpo de un hombre, Duncan Edwards, quien hizo su debut en el primer equipo a la edad de tan sólo 17 años.

Auge de los Babes

No todos los jugadores de Busby eran "Babes" provenientes de Manchester. En marzo de 1953 firmó al centro delantero Tommy Taylor quien venía del Barnsley, por £29.999. Taylor hizo una formidable pareja con Dennis Viollet, particularmente en 1955/56, temporada en la que uno o el otro anotaron 21 goles en total en los 27 partidos en el que estuvieron juntos.

El United se escapó con el título, al ganarlo el sábado 7 de abril de 1956 en partido contra el Blackpool, el equipo al que habían vencido cuando ganaron el primer trofeo de Busby (la Copa de la FA de 1948). La edad promedio de los jugadores del equipo era de apenas 22 años. “Todavía tenían las marcas de la cuna, pero no se les notaba”, dijo Busby, radiante de orgullo.

El desafío ahora era demostrar que los éxitos del título de la liga de 1955/56 no habían sido estrellas fugaces. Pero Busby no estaba satisfecho con dominar solamente el fútbol nacional: buscó un nuevo reto, y los encontró en la Copa Europea. United participó por primera vez en la Copa Europea en la temporada 1956/57, inicialmente sin la autorización oficial de la liga Football League. En la ronda preliminar, arrasaron al equipo belga Anderlecht 10-0 bajo las luces del Maine Road, luego de dos victorias y ninguna derrota fuera de casa. Esa tabla de anotaciones sigue siendo la mayor del United en encuentros de torneos. Luego de vencer también al Borussia Dortmund y al Athletic Bilbao, el United salió de la competencia en la semifinal, cuando el gran equipo de Madrid demostró ser demasiado astuto en una derrota que tuvo un conteo total de goles de 5-3 en dos encuentros.

En casa, el ejército Rojo continuaba su avance. Un joven aspirante, Bobby Charlton, anotó dos veces en su debut, bastante paradójicamente contra el Charlton Athletic, y fue sacado del equipo poco después, tantos eran los talentos a la disposición de Busby. Una vez más, en esta oportunidad la número cinco, el United aseguró la Copa Juvenil de la FA mientras el torrente de talentos seguía su curso.

El United conservó el título de la liga gracias a la admirable pareja de Taylor y Viollet, pero el principal anotador fue Liam Whelan de Irlanda, quien anotó 26 goles. El United se había convertido en una fuerza incontenible, o casi. El Aston Villa no dejó que ganaran el primer doblete de la liga y de la Copa de la FA de la era moderna, con una victoria controversial del Villa 2-1 en el Wembley. El anotador de los goles del Villa, Peter McParland, fue el villano de la noche, al embestir contra Ray Wood con el hombro, lo que causó que el guardameta del United sufriese una fractura en el pómulo.

A pesar de esa frustración, el tiempo estaba a favor del United. Las mentes pronto se orientaron hacia la captura de un tercer título seguido, y en otro asalto a Europa. Busby reforzó a sus Babes con otra gran adquisición, Harry Gregg, por el que pagó una cifra récord para un guardameta.

La temporada se desarrolló de manera muy similar a las dos anteriores, con un progreso sostenido y sin sobresaltos tanto a nivel nacional como en Europa. El mes de febrero abrió con un emocionante encuentro contra el Arsenal en Highbury. En un absorbente encuentro, el United superó 5-4 a los Gunners; la preparación ideal para el temible viaje al juego de cuartos de final de la segunda etapa de la Copa Europea frente al Red Star Belgrade...