El danés se mostró decidido a ayudar al equipo a progresar en las dos copas que le quedan.
A principio de año, Christian Eriksen sufrió una dura lesión en el tobillo, que lo obligó a mantenerse al margen del plantel mayor por varias semanas, perdiéndose la final de la Carabao Cup ante Newcastle United en Wembley.
Pese a haberse quedado afuera de varios partidos importantes, el mediocampista de 31 años volvió a sumar minutos el pasado sábado en Old Trafford, donde Manchester United le ganó a Everton por Premier League.
Contento con su reciente regreso a las canchas, Eriksen se mostró encantado de poder ayudar a sus compañeros nuevamente, teniendo en cuenta que el equipo todavía está en carrera tanto en la FA Cup como en la Europa League.
“Les dije a los chicos que siguieran ganando partidos para que pudiésemos seguir jugando cuando volviera”
, comentó el danés en el último episodio del podcast oficial del club.
“Cuantos más partidos ganaran y más copas siguieran disputando, yo iba a tener más posibilidades de jugar una final. Para mí, este es un buen momento para volver y darles ese último empujón”, agregó.
Al mismo tiempo, Christian lamentó haberse perdido la final de la Carabao Cup por lesión.
“Todavía no la tengo [a la medalla de campeón], pero se supone que en algún momento me la van a dar. Igualmente, creo que es diferente cuando no juegas la final”
, confesó.
“Obviamente, [los que la jugaron] la recibieron en la cancha. En ese momento, yo estaba cojeando con la bota y tratando de no moverme demasiado, pero aun así quería formar parte”, añadió.
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