David de Gea

De Gea vs. Schmeichel: Por qué elijo a David

jueves 22 febrero 2018 13:33

Siempre he pensado que es una cuestión generacional. Por lo general, les tenemos mayor estima a los jugadores de nuestra juventud que a aquellos que conocimos más tarde en la vida.

Puede ser que solo seamos más impresionables y los miremos con mayor reverencia o quizá simplemente los veamos a través de lentes color de rosa.

Ciertamente, siempre he pertenecido al grupo que cree que Diego Maradona es el mejor futbolista que jamás haya existido... los mayores que yo dirán que que son George Best o Pelé. La generación actual se declarará a favor de Lionel Messi o Cristiano Ronaldo, y es difícil refutar las estadísticas que respaldan esta afirmación. Aun así, votaría por Maradona, a quien vi jugar en Wembley contra Inglaterra cuando yo era niño y él apenas un adolescente. Sus logros con el Nápoles y Argentina fueron cosa de otro mundo.

Del mismo modo, nunca pensé que habría un mejor portero que Peter Schmeichel en el Manchester United. Si bien es cierto que Edwin van der Sar aportó elegancia, excelencia y serenidad al juego, para mí, el danés estaba en otro nivel. Recuerdo haberme emocionado por su contratación, que aparentemente se prolongó durante meses, y calificaría sus actuaciones en la victoria de su país en la Eurocopa 92 como unas de las contribuciones más influyentes del torneo, aunque no se puede comparar del todo con las hazañas de Maradona en la Copa Mundial de 1986.
Peter Schmeichel demostró que era el mejor portero del mundo en la Eurocopa 92.
Para el United, Schmeichel fue un coloso. Sé que cometió errores en el transcurso de los años, pero estos fueron extremadamente raros y resultan insignificantes cuando recordamos el aura que lo rodeaba; brindaba la constante seguridad de que tenía todo bajo control entre los tres palos. Cientos de recuerdos inundan mi mente: recuerdo una visita entre semana al Everton en la que paró un penalti y estuvo deslumbrante, el triunfo 1-0 decisivo sobre el Newcastle United en 1996, incluso el hecho de que luchó duramente para bloquear uno de los goles en la dolorosa derrota 5-0 ante los Magpies a fines de ese mismo año.

En Austria, fui testigo de la mejor parada de su carrera –en cancha del Rapid Viena– y pensé que siempre les contaría a mis nietos de este excelente guardameta escandinavo, el mejor que jamás había visto. Anoche, durante el encuentro de la Champions League, sucedió algo que jamás imaginé. Cambié de opinión, y puedo ser muy testarudo cuando se trata de cosas como estas.
De Gea me hizo sentir exactamente lo mismo que Schmeichel cuando el Sevilla aumentó la presión antes del descanso. La mera creencia de que cualquier situación es salvable, cuando tienes esa fracción de segundo para pensar y procesar lo que está sucediendo y pensar: 'es un gol', y sin embargo no lo es, porque nuestro superespañol todavía puede intervenir.

Schmeichel solía ser muy bueno en jugadas uno contra uno, hacía los saltos estelares que aprendió cuando jugaba balonmano y lucía imbatible. De Gea tiene menos presencia pero más agilidad y, para ser totalmente sincero, la salvada a tiro de Luis Muriel pareció desafiar las leyes de la física en el momento en que la pelota se dirigía hacia la portería a quemarropa. Su juego versátil, su consistencia y su naturaleza imperturbable me han convencido totalmente.
Vídeo
Mira las grandes intervenciones de De Gea contra el Sevilla en la Champions League.
Lo apoyé cuando llegó procedente del Atlético de Madrid, un chico español delgado; pero luego de un comienzo poco convincente, desenvainó la espada, haciendo honor a su buena reputación y demostrando que ahí estaban los atributos en bruto. Pero nunca pensé que alguna vez llegaría a decir que es el mejor guardameta del Manchester United que he jamás haya visto en mi vida. Sin embargo, ese es el reconocimiento que le puedo hacer ahora, y me pregunto si otros seguidores, incluso aquellos que recuerdan a Schmeichel en su mejor momento, estarán de acuerdo.

Las opiniones expresadas en este artículo son del autor y no reflejan necesariamente las posiciones oficiales del Manchester United Football Club.
David de Gea llegó en el 2011 como un novato y delgado portero.