La unión hizo la fuerza

Bajo un ámbito de resonantes críticas y negatividad, los dirigidos por Ole Gunnar Solskjaer tenían la obligación de dejar todo atrás para reencontrarse con el triunfo y encarar lo que queda de enero de la mejor manera posible. Afortunadamente, no tuvieron problemas ante un Norwich débil y sin poca reacción, por lo que pudieron ganar con la tranquilidad que tanto estaban necesitando.

En el primer tiempo, los chicos arrancaron el encuentro muy bien parados en el campo de juego, donde lograron hacerse con el control de la pelota rápidamente para empezar a darle valor a la localía. Andreas Pereira entretuvo al público con un par de gambetas bastante atractivas, al igual que Marcus Rashford, que se ganó los aplausos de la gente al dejar en el camino a dos defensores visitantes durante los minutos iniciales.

Pese a este claro dominio, los Red Devils no pudieron molestar demasiado a Norwich debido a la falta de profundidad que suele opacarlos en ofensiva. Sin embargo, esta situación cambiaría de forma rotunda tras una jugada que alteraría el curso del partido.

Antes de la primera media hora de juego, Juan Mata encontró su mejor perfil en el sector derecho y le propinó un centro quirúrgico a Rashford, que terminó poniendo el 1-0 con la quietud característica de un delantero de su nivel.

Tras el gol, Manchester United se mostró un poco más directo a la hora de atacar, pero no pudo estirar la ventaja pese a los intentos de Anthony Martial y Brandon Williams. Sin dudas, una situación que preocupó a todo Old Trafford, que terminó agarrándose la cabeza cuando los de verde y amarillo casi marcan el empate a segundos del entretiempo. Sin embargo, esta historia cambiaría por completo en la segunda parte.

En el complemento, el juvenil Williams obligó a Tim Krul a cometerle penal tras una corrida peligrosa por la banda izquierda. La mala decisión del holandés condujo a Rashford a meter un nuevo doblete por Premier League para empezar a darle cierre a un encuentro que siempre tuvo a los locales como firmes protagonistas.

Dos minutos más tarde, Mata selló su segunda asistencia de la tarde al encontrar a Martial con otro hermoso centro al área rival. El francés, que se moría de ganas por dejar su huella en el partido, no dudó en aprovechar el momento para conectar un cabezazo imposible para el arquero.

Con un contundente 3-0 a favor, los chicos se soltaron aún más en el desarrollo, donde dejaron en claro que tienen lo que hace falta cuando se lo proponen y consiguen librarse de las críticas más dañinas.

Por consiguiente, Mason Greenwood, que había ingresado en lugar de Pereira, no tardó en hallar un pequeño espacio para poner el cuarto tras un zurdazo al ras que sorprendió a toda la defensa de Norwich. Sin ser titular, el juvenil volvió a demostrar que puede meterse en partido en pocos segundos e incluso marcar la diferencia de forma individual. Indudablemente, un delantero que no perdona.

Tras el pitazo final, Manchester United sintió un alivio enorme al conseguir su primera victoria del 2020 de cara a los encuentros que se vienen. Asimismo, el equipo logró sumar una nueva valla invicta gracias al buen rendimiento de David De Gea, que impidió que los visitantes llegaran al empate con una enorme atajada sobre el final del primer tiempo.

Este triunfo le dio forma a una reacción perfecta luego de un arranque de año dudoso, que obligó al DT a levantar la moral en el vestuario para volver a ganar por el campeonato local. Porque unidos siempre es más fácil, sobre todo cuando la historia puede comenzar a tomar el rumbo que había encontrado en diciembre, un mes lleno de alegrías y buenos resultados.

Las opiniones expresadas en este artículo son de la autora y no necesariamente reflejan el punto de vista de Manchester United.