Cómodo triunfo en Old Trafford

Esta temporada, Manchester United tuvo algunos inconvenientes a nivel local. Cayó ante Crystal Palace en el debut, perdió por goleada ante Tottenham Hotspur en el Teatro de los Sueños y no pudo doblegar a Arsenal en este mismo escenario. Pero, como buen equipo grande, no dudó en poner las cartas sobre la mesa para hacerse notar en una competencia que suele sacar lo mejor de sí: la Champions League.

Tras vencer a Paris Saint-Germain y RB Leipzig en las jornadas anteriores, los muchachos de Solskjaer volvieron a agrandarse en Inglaterra, donde le ganaron 4-1 al Estambul Başakşehir de Turquía, que venía de darles una interesante sorpresa en el Fatih Terim.

En una noche perfecta para jugar a la pelota, Bruno Fernandes abrió el marcador con un gol de otro planeta, sorprendiendo a propios y ajenos. Para colmo, el arquero rival le regaló el segundo cuando ni siquiera habían transcurrido 20 minutos de partido.

Más tarde, Marcus Rashford cambió penal por gol gracias a la solidaridad del portugués, que le cedió el balón en un gesto de compañerismo realmente notable. Y, cerca del cierre, Daniel James se reencontró con el fondo de la red tras meter el 4-1 final bajo las luces del mítico Old Trafford.

Este cómodo triunfo no solo mejoró la posición de los Red Devils, sino que les dio un toque extra de confianza de cara a los desafíos que se vienen. Porque, aunque la clasificación esté a la vuelta de la esquina, noviembre aún no terminó, y los chicos lo tienen más que claro.

El próximo domingo, Manchester United visitará a Southampton en el St Mary’s Stadium, donde buscará ampliar esta racha e imitar lo hecho esta noche ante Estambul Başakşehir.

Por este camino, todo es posible.

Las opiniones expresadas en este artículo son de la autora y no necesariamente reflejan el punto de vista de Manchester United.