Resumen de campaña: Enero

Tras un cierre de año sumamente esperanzador, Manchester United arrancó la década ante Arsenal en el Emirates Stadium, donde esperaba sumar un nuevo triunfo de cara a la segunda parte de la temporada.

Lamentablemente, el cansancio de diciembre le jugó una mala pasada y terminó cayendo en las garras de un equipo que no venía bien, pero quería empezar a levantar cabeza a toda costa.

Como era de esperar, esta derrota sentó un ambiente difícil, que se extendió al menos una semana más como consecuencia de los resultados ante Wolverhampton Wanderers y Manchester City.

No obstante, los chicos lograron recuperarse momentáneamente ante Norwich City en Old Trafford, donde se impusieron por 4-0 con goles de Marcus Rashford (2), Anthony Martial y Mason Greenwood.

Asimismo, consiguieron una victoria clave ante Wolves por FA Cup, que les permitió avanzar a la siguiente ronda del torneo. Sin embargo, en este encuentro sufrieron la baja de Rashford, que tuvo que salir por una compleja lesión de espalda cuando restaban 10 minutos para el pitazo final.

Sin la presencia de su delantero estrella, los Red Devils tuvieron que enfrentar a Liverpool y Burnley con una diferencia de solo dos días entre cada partido.

Por desgracia, el peso de esta interminable seguidilla, sumado al descontento de la gente, que parecía aumentar cada vez más, no los ayudó en absoluto y acabaron sumando dos nuevas derrotas por Premier League.

Pese a lo sucedido en el clásico, jugadores como Harry Maguire y Fred se mostraron firmes en sus posiciones, demostrando tener lo que hacía falta para continuar defendiendo la camiseta del club. Por lo tanto, la racha que llegó después no debería haber sorprendido a nadie.

En el penúltimo duelo del mes, Manchester United visitó a Tranmere Rovers por cuarta ronda de FA Cup.

Como el equipo se encontraba atravesando un período más que difícil, todos esperaban que los locales dieran la sorpresa, eliminando al conjunto de Ole Gunnar Solskjaer para darle el golpe final a un DT que solo quería ver triunfar a sus dirigidos.

Afortunadamente, los muchachos cambiaron el chip a tiempo, ganaron nada más ni nada menos que 6-0 y dieron vuelta la página en un momento crucial de la campaña.

Tras esta gran victoria, todas las miradas se centraron en un solo rival: Manchester City.

Aunque la ida haya terminado 3-1 a favor de los de Pep Guardiola, los chicos sabían que contaban con las armas suficientes para quedarse con la serie y clasificar a la final de la Copa de la Liga, sin Rashford, Paul Pogba y Scott McTominay en la plantilla.

Tristemente, el 1-0 de Nemanja Matić no les alcanzó, pero aun así les sirvió para silenciar a todo el Etihad y volver a casa con un nuevo triunfo en el bolsillo.

Pese a que algunos hayan criticado esta eliminación, todo el plantel había mejorado de forma notable en los últimos dos encuentros del mes.

Por ende, el invicto de febrero y marzo no fue casualidad, sino el fruto del trabajo incansable de jugadores y cuerpo técnico, sumado a la incorporación de Bruno Fernandes y Odion Ighalo, dos refuerzos que llegaron en el momento justo.

Las opiniones expresadas en este artículo son de la autora y no necesariamente reflejan el punto de vista de Manchester United.