El último partido de los Busby Babes
En febrero de 1958, el equipo jugó su encuentro final ante Estrella Roja de Belgrado por la Copa de Europa.
En un cierre de década que parecía destinado a verlos brillar, los Busby Babes salieron a la cancha ante la presencia de más de 50 mil personas. El estadio de Partizán de Belgrado se encontraba lleno de hinchas locales, que tenían la esperanza de que su equipo lograra revertir el 2-1 de Old Trafford.
A pesar de la fe de la gente de Estrella Roja, Manchester United arrancó el partido con todo y se puso en ventaja cuando solo habían transcurrido dos minutos del pitazo inicial. Dennis Viollet aprovechó el error de la defensa rival, vio al arquero adelantado y definió con un lindo remate de derecha al palo izquierdo del portero.
Pese al ajustado resultado de la ida, la superioridad de los muchachos salió a relucir en este encuentro decisivo, donde todos querían hacer mérito para clasificar a la siguiente ronda.
Por consiguiente, Bobby Charlton, que en aquel momento tenía solo 21 años, dejó mudo a todo el público presente tras convertir dos goles en poco más de un minuto.
El equipo estaba jugando un fútbol ideal, ya que nada parecía doblegarlo. Ni las bajas temperaturas, ni el hecho de estar lejos de casa. No por nada se había puesto 3-0 arriba en el primer tiempo, donde tal vez podría haber estirado la ventaja aún más.
De todas formas, Estrella Roja encaró el complemento con una actitud totalmente distinta gracias al constante aliento de su gente y, sobre todo, a los esfuerzos de su DT. Por lo tanto, no tardó en descontar y sorprender a los Busby Babes, que se habían confiado tras lo ocurrido en la primera parte.
Lamentablemente, las polémicas decisiones del árbitro de turno beneficiaron a los dueños de casa, que terminaron empatando el partido.
Sin embargo, la victoria en la ida pesó mucho más que estas extrañas contrariedades y les dio a los chicos el tan ansiado pase a la semifinal de la Copa de Europa por segundo año consecutivo. Indudablemente, un logro enorme, ya que todos querían avanzar a la última instancia y, por qué no, quedarse con la copa por primera vez en su historia.
Luego del partido, gran parte del plantel de ambas parcialidades, dirigentes y periodistas se dirigieron hacia el Majestic Hotel de la ciudad de Belgrado, donde fueron agasajados con un banquete en señal de agradecimiento por su visita al país extranjero.
Tristemente, este fue el último partido de los Busby Babes, ya que ocho de sus integrantes perdieron la vida en el fatal accidente del 6 de febrero, incluyendo al gran Duncan Edwards, que murió varios días después como consecuencia de sus graves heridas.
Su recuerdo permanecerá presente en los corazones de todos los hinchas del club.
Las opiniones expresadas en este artículo son de la autora y no necesariamente reflejan el punto de vista de Manchester United.